Gran parte del mundo dio un giro de 180 grados en marzo del 2020, cuando se pisaron las oficinas de trabajo o se visitaron a los familiares por última vez. ¿Quién podía imaginar que el próximo encuentro no llegaría hasta pasados unos meses?
El confinamiento a causa del COVID-19 ha cambiado nuestras vidas en muchos sentidos. Desde la forma de relacionarnos, hasta nuestros hábitos de consumo. Y en este escenario, surge el low touch economy o economía de bajo contacto.
¿Qué es? ¿Cómo surge? ¡Arrancamos!
¿Qué es low touch economy y cuáles son sus características?
Es un término surgido tras la pandemia para definir la evolución de las transacciones comerciales, basadas en el mínimo contacto entre las personas. Las empresas se han visto obligadas a adaptarse a este nuevo modelo de interacción para tener éxito en el escenario del coronavirus.
Está previsto que la nueva economía tenga un efecto duradero en el mundo. En cualquier caso, estamos atravesando un periodo de rápido aprendizaje marcado por la incertidumbre económica. La llegada del low touch economy no significa el fin de las ventas regulares, pero sí la modificación de los modelos de negocio para afrontar los grandes cambios en la economía global y local.
En definitiva, la pandemia del COVID-19 ha impulsado el cambio de hábitos en los consumidores y en los negocios. Y el low touch economy es consecuencia de esta evolución. Gran parte de las empresas que vendían sus productos físicamente han tenido que emprender en tiempo récord un proceso de transformación digital. ¿El resultado? Más y más eCommerce.
Y aunque es una práctica que ya estaba prevista para realizarse en los próximos años, lo cierto es que nadie imaginó que en unos meses se pudieran alcanzar tales objetivos. Los negocios se han adelantado y adaptado rápidamente a los cambios en la sociedad, con el fin de optimizar tiempos y costes, evitar largas filas en las cajas, ofrecer transacciones más rápidas y reducir los contagios, entre otras cosas. En definitiva, mejorar la experiencia de compra de los clientes.
No es de extrañar que los hábitos se extiendan en el tiempo: home office para largo, preferencia por recibir las compras a domicilio, conciertos desde el sofá y atención médica en canales digitales.
¿Es este el inicio de una nueva era?
6 ventajas de la economía de bajo contacto en tiendas
Hemos recopilado las ventajas clave del low touch economy para que las tengas a mano. Con ellos no solo se hace referencia a la manera en que las empresas operan durante la pandemia, sino a los pilares que sustentan el nuevo modelo económico de los negocios:
- Gestión de recursos, actividades y datos de forma práctica e integral a través de un software que permita las automatizaciones inteligentes.
- Reducción del número de contactos que se deben realizar a lo largo del servicio.
- Mayor visión sobre las actividades, las innovaciones, la experiencia del cliente y la previsión de las demandas.
- Reducción del costo de adquisición del cliente (CAC), una fórmula que divide las inversiones en mercadotécnica y ventas por el número de negocios cerrados.
- Disminución del costo de producción de servicio o producto y su utilización en otras inversiones.
- Mayor comodidad y autonomía para el consumidor o usuario final.
Para obtener todas estas ventajas, lo ideal es contar con un software personalizable que nos permita mejorar la toma de decisiones. Ahora que el mundo ya es low touch, ¿qué estás haciendo para adaptarte?
¿De dónde viene y para dónde va? ¡Conclusiones!
¡Dato curioso! ¿Sabías que el término low touch economy fue acuñado por el equipo de Board of Innovation?
El modelo low touch economy viene de las restricciones ocasionadas a raíz del COVID-19. Pero no solo es un efecto social, sino económico y en la forma en que intercambiamos bienes y servicios. En tan solo unos meses, hemos visto grandes cambios en la forma en que la sociedad se maneja, pero lo más impactante es cómo nos hemos adaptado a ello.
No hablamos de low touch economy como algo mejor o peor, sino de una situación diferente en donde los comportamientos que se han generado han ido cambiando, así como nuestros hábitos. Se trata de un auténtico periodo de aprendizaje para todos, donde la incertidumbre económica es la protagonista.
Las cosas han cambiado en hábitos tan habituales como el saludo. ¿Dónde quedó lo de estrecharse la mano y darse dos besos? Y también en las formas de pagar una compra, en las regulaciones y en cómo se usa la tecnología. En definitiva, se espera que siga habiendo cambios en cómo consumimos. Sin ir más lejos, España está viviendo un gran impacto en las entregas de comida a domicilio. Antes, llegábamos al súper, cogíamos los productos, pagábamos en la caja, llegábamos a casa y colocábamos la compra. Ahora, es suficiente con tener un PC o un smartphone para hacer nuestro pedido online y recibir la compra en casa. ¿Por qué crees que cada vez hay más aplicaciones y servicios que ofrecen facilitarnos la vida en este mundo del bajo contacto?
La era low touch economy ha venido para transformar nuestro mundo. Estamos por entrar en una etapa de nuevos hábitos y regulaciones en todos los sectores empresariales. La crisis sanitaria del COVID-19 nos ha hecho entender que la distancia social es necesaria como medida de seguridad ante este mundo tan globalizado. Sin duda, esto repercutirá en la manera en que trabajamos, compramos y socializamos. Y puede que muchas empresas sigan manteniendo el modelo remoto o inicien una modalidad mixta con espacios de trabajo más reducidos.
En cualquier caso, estamos ante la automatización de procesos, la optimización y la especialización, donde el comercio electrónico mantendrá un alto nivel de demanda. Ahora, es más vital que nunca comprender el nuevo modelo económico con el fin de diagnosticar, reestructurar y regenerar estrategias de transformación digital que ayuden a las tiendas físicas a resurgir.
En PayXpert, queremos ser tu plataforma elegida en esta transición a una low touch economy, menos contacto con las personas y más con la tecnología.